La venganza es dulce [James]

Noté como sus palabras se me clavaban con odio mientras me desabrochaba el pantalón. Sabía que ella lo hacia por pura diversión…Era odiosa.
Fue en un suspiro cuando consiguió que abriera la boca y darme la fresa, no la mordí pero noté como algo me hacia cambiar el pensamiento. No me hacia ninguna gracia tener que estar a su merced.
Pese a eso, mis manos empezaron a juguetear con su ropa y subiendo por su espalda notando el cierre del sujetador. Me resistí.

Sonreí al notar como, a pesar de no morder la fresa, sí le daba una probada, aquello sería suficiente para, en tres segundos, tenerlo delirando por mí. Por eso prefería las pociones orientales, siempre tenían una mejor preparación y un mayor efecto.

Además de que James ya no estaba del todo coherente, sentir sus manos sobre mi espalda me lo indicaba, ahora quería probar con qué tanta fuerza le había golpeado la poción.

Me levanté de encima suyo y me quité la falda en un ademán meramente provocativo y luego entré a la bañera que estaba llena de agua caliente y burbujas. Desde ahí le sonreí a James y esperé su respuesta.

Sabía que aquella tipa se lo estaba pasando demasiado bien, al revés que yo que cada vez me sentia más descontrolado y más me odiaba por haber caido en su trampa.
Vi como se metía en la bañera pero noté como mis piernas se movian sin ni siquiera yo mandarlas, mi cuerpo parecia no tener control sobre mi. Fui caminando hacia la bañera pero me resistí a quitarme cualquier trozo de ropa más, almenos intentaría no ponerselo tan facil...pero, aunque mi cabeza siguiese bien, mi cuerpo ya no me hacia caso...
Llegué hasta la bañera y me arrodillé delante de esta, no quería darle facilidades, aunque poco a poco parecia que se me iba de las manos.

OFF: Piensas hacer el sufrimiento muy largo? ¬¬

Al parecer James seguía con la cabeza intacta, y lo que yo querís es que esa cabecita suya dejara de pensar tanto, ese no era mi propósito. Afortunadamente había traído la poción conmigo, si no era suficiente con el que estaba en mis labios, entonces tendría que hacer que le diera un trago y teniendo su cuerpo a mi merced, sería más fácil disuadirlo.

Me salí un momento de la bañera, saqué la botellita de mi túnica y me acerqué de nuevo a JAmes para besar sus labios fervientemente. Él correspondió al beso y en un momento de descuido, hice que tragara un poco más de poción. Adiós resistencia, ahora sí James dejaría de pensar en lo malo que sería esto, al contrario, ahora sí que lo desearía.

Entré seductoramente a la bañera y lo miré con coquetería

- ¿Mejor ahora James?
Off: mientras más te resistas peor será para ti

Miré a Sophie con dureza, o almenos aquella era mi intención. Si querer hacerlo me quité el pantalón y me metí en la bañera.

- Su-supongo.-dije confundido.

Sabia que yo no quería hacer aquello, la odiaba a más no poder por hacerme aquello, pero no podia librarme de ella. Parecia que mi cuerpo iba por si solo por mucho que quisiera. Además no veia a Sophie tan claramente como antes. Estaba volviendome loco? Como podria estar con aquella bruja si yo sabia perfectamente con quien querría estar? Pese a eso me quede en la bañera sin hacer movimiento alguno.

Me reí, este juego se estaba haciendo de lo más interesante, mientras más se resistía James, yo más me divertía, pues sabía que al final no podría pensar coherentemente, olvidaría todo y sus deseos se volverían lo único importante. Cuando entró a la bañera yo sonreí triunfante y me coloqué tras él para darle un suave masaje.

- Relájate James, no hace falta que te resistas, deseas esto y lo sabes, si dejas de pensar tanto, descubrirás lo bien que te la puedes pasar conmigo - susurré en su oído sensualmente para luego morder el lóbulo de su oreja.

No podia moverme, de hecho odiaba no poder hacerlo. Aquella maldita habia conseguido que hiciese lo que ella quería. La odiaba muchisimo.
Pese a eso, no pude evitar que mi cuerpo se estremeciera cuando me mordió el lóbulo de mi oreja.
Miré hacia atrás y asentí. ¿que coño estaba haciendo? Yo no quería asentir, pero al parecer yo ya no mandaba sobre mi mismo.

- Está bien Sophie...-dije como si fuese una máquina.

Aquellas palabras no habian pasado por mi cerebro, habian salido como si otra persona las hubiese dicho por mi.

Sonreí triunfantemente ante las palabras de James, así que estaba bien no? PUes ahora le demostraría lo bien que estaríamos después de que dejara de pensar tanto, en cuanto se dejara llevar por el deseo, le daría la fresa, sentiría el mayor y puro amor por mí, y luego simplemente haría un hechizo para que borrara un par de cosas de su memoria.

- Bien, entonces demuéstrame lo mucho que deseas que esto suceda, James - le pedí recostándome en la bañera ymordiendo mis labios con sensualidad.