De vuelta a la sala común (James y libre)

Seguía por allí había pasado ya mucho tiempo desde mi marcha así que decidí ir a buscarle, iba a salir por el retrato de la dama gorda cuando un murmullo quejicoso me hizo sonreir.

-¡James!-Exclamé mientras me acercaba-Iva a ir a buscarte...-Le dije.-¿Cómo has tardado tanto?-Pregunté-¿Todo bien?

Inconscientemente lo examiné de arriba a abajo¿Porqué estaba haciendo eso?No debería de importarme tanto.Parecía que estaba bien.Miré el reloj, pasaba ya la una de la madrugada, esperaba no haber despertado a nadie con mis palabras.

Al principio me asustó el grito de Lily y después sonreí divertido cuando ella me examinó de arriba a abajo.

- Me gusta escuchar eso.-dije sonriendo.- Lo cierto es que fui a...-pensé en el rato pasado en la torre- al baño, y después me pilló McGonagall, mañana creo que estaré con ella todo mi tiempo libre.-dije con cara de asco.- Adoro pasar tiempo con la tercera edad.-dije riendo.

Después la miré de nuevo y entré en la sala para sentarme delante del fuego, lo cierto es que habia estado bastante rato en la torre, pensando demasiado...Ahora ya me habia desvelado entre eso y la vieja.

- Pensaba que ya estarias durmiendo.-dije sonriendo un poco.

Reí cuando dijo que le gustaba pasar tiempo con la profesora McGonagall.-Si , eso ya se nota...-Dije divertida.
Él fue a sentarse junto al fuego con una sonrisa en su rostro entre frase y frase, siempre parecía feliz ocurriese lo que le ocurriese, era parte de su personalidad, no se parecía preocupar por esas cosas.
-Si, bueno...la verdad es que, me quedé preocupada, no podía dormir dejando en mi conciencia que algo malo hubiera ocurrido -acabé confesando, aunque eso no implicaba nada yo era extremadamente responsable en cualquier asunto.

-Emmm...creo que...-Hice una pausa-es hora de que me vaya a dormir-Dije mientras dirigía mis pasos hacia la zona de dormitorios de las chicas.

Miré a Lily divertido desde el sofá, habia pocas cosas que me hicieran perder la sonrisa o el buen humor. Una era Snape, y otra que tocasen a alguien que queria. Lo cierto es que considerando que mis padres estaban muertos, ahora lo único que me preocupaba era Sirius y Remus, pero ambos sabian cuidarse. Así que me dedicaba a crear la fama de que James Potter siempre es feliz.

-Si es solo eso, ya puedes dormir tranquila.-dije sonriendo.- Estoy vivo y la profesora McGonagall no me ha hecho nada, es vieja y fea, pero no es tan mala. Tan solo un pelín amargada.-dije haciendo burla.

Me tumbé en el sofá mientras veia como Lily se despedia y se iba hacia la habitación de las chicas. La miré desde lejos.

- Yo creo que esperaré a Sirius, no tengo sueño.-dije sonriendo. Lo cierto es que algo me habia desvelado totalmente.- Buenas noches entonces, supongo, pelirroja.-dije riendo desde el sofá.- Aunque si no puedes dormir seguiré aquí tumbado.-le guñé el ojo.

Cuando habló sobre la profesora le miré enarcando una ceja.
-Pues, a mi ella no me disgusta tanto, es una gran profesora, estoy segura de que permanecerá aquí muchos años.

Comenté dándole mi opinión, claro que seguro que diría que James era una mala influencia para mí, si te portabas bien la profesora de transformaciones podía ser un encanto, pero si eras cómo James...la cosa cambiaba, y mucho, y a él lo tenía ya entre ceja y ceja
-Se porta así contigo porque le diste motivos para desconfiar desde el primer día que pisamos esta escuela-Le dije negando con la cabeza mientras reía

Luego dijo algo que me hizo pensar.Le miré con una especie de mueca que evitaba una sonrisa que no tardó en aparecer en mi rostro... de forma inevitable-¿Eso es una invitación a que me quede?-Pregunté de forma perspicaz mientras miraba al sofá dónde James

-No hace falta que me llames a todas horas por mi color de pelo, ¿Tengo nombre sabes?-Le dije algo molesta cruzámdome de brazos.

Miré a Lily divertido, lo cierto es que precisamente McGonagall no era de las profesoras a las que odiara. Ella muchas veces me habia salvado de morir castigado en el aula de otros profesores, además, en cierto modo no sabia si matarme o halagarme por ser tan bueno en transformaciones. Al fin y al cabo Sirius y yo eramos bastante buenos en los estudios, sobretodo en Defensa contra las artes oscuras y transformaciones.

- Bah,-dije riendo.- En el fondo le caigo bien.

Después alcé una ceja cuando Lily me preguntó si aquello era una invitación. Algo pasó por mi mente y después reí.

- Podría serlo,-dije sonriendo.- pero supongo que como buena alumna a estas horas ya deberías estar durmiendo, además de que el hecho de que te vean a estas horas con James Potter no te va muy bien.-dije sonriendo.´

La miré de nuevo poniendo cara de sorpresa cuando me dijo molesta lo de pelirroja.

- ¿Que pasa? Me gusta tu color de pelo.-dije sonriendo.- Pero esta bien, no te volvere a llamar pelirroja Lils.

Odiaba tanto cómo me encantaba en otras ocasiones su forma de bromear, ¿Es qué no podía estar serio y dejar su arrogancia de lado un momento?
-Si, cómo buena alumna me iré a la cama entonces, y no me ausentaré en la noche con malas influencias para mí.-Dije mientras con gesto enfadado lo miraba de reojo.

Cogí las puntas de mi pelo entre mis manos mirándolo, de un color rojo oscuro, con poco igualaba al del fuego de la chimenea-A mi también me gusta-Dije orgullosa-Pero no soy sólo un color de pelo.

-En fin. creo que..me, tengo que ir...-Le dije intentando despedirme por segunda vez, quería marcharme , pero tambien deseaba quedarme allí junto al fuego y junto a James.

Miré a Lily divertido y después asentí. No queria que se fuera pese a que seguramente era aquello lo que haria.
Cuando escuche sus siguientes palabras me levanté y me puse frente a ella clavando mis ojos divertidos en los serios suyos.

- Está claro que no eres únicamente un color de pelo Lily Evans.-dije acercándome a su rostro.- Eres más que eso.

Seguí quedándome cerca de su rostro hasta que dijo que se iba. Me separé un poco y la miré con cara e niño triste.

- ¿Te vas?-dije mirandola.- Está bien...pero acuerdate de que si no puedes dormir yo estaré aqui abajo. -dije sonriendo un poco.- Buenas noches princesa.-dije imitando un tono caballeresco.

Cuando se levantó y me dijo aquello no supe cómo reaccionar muy bien, se acercaba a mi rostro, y otra vez ese nudo en mi estómago se mantenía y se hacía más fuerte.No dije nada, mas que nada porque no podía articular palabra.

-Si, debería dormir un poco...-Le dije con un hilo de voz, en el fondo no tenía ninguna gana de irme.-Lo recordaré-Le dije haciéndole un guiño simpático esta vez.

-Buenas noches Sir James-Le dije haciendo una reverencia a modo de broma antes de marcharme.Por mucho que quisiera no debería quedarme ahí.Sabía que no iba a poder dormir despues de todo lo que había ocurrido.Pero no quería caer de nuevo bajo los encantos de Potter.No en la sala común.

No tenia ningunas ganas de que ella se fuera, pero sabía que ella quería hacerlo, o eso me parecia. Al fin y al cabo ella no quería que nos vieran juntos.
Esperé con una sonrisa y la mano en forma de adiós a que se fuera. Después me aerqué al sofá de enfrente de la chimenea y me tiré quedándome tumbado. No era la primera vez que lo hacia por lo que sabia que a la mañana siguiente, si me habia dormido, Sirius me despertaría después de su noche fuera de la sala común.
Puse los brazos detrás de mi cabeza y miré otra vez a los dormitorios de las chicas. Después, abandonando la idea de que volviera a bajar, fijé mi vista en el fuego.
Notaba como mis ojos querían cerrarse, pero aún tardaría un poco en quedarme totalmente dormido.

Fui al dormitorio de las chicas, llegué con cuidado, sin hacer ruido por suerte ninguna de mis compañeras se despertó, me puse un bonito camisón y me metí en la cama.
Miraba al techo dándole vueltas y vueltas a todo lo que había ocurrido hoy, ¿Me estaba enamorando de aquella mala influiencia?Justo era solo que había intentado negarme todo ese tiempo, justo en lo que me había negado a convertirme, ya lo había hecho.Me incorporé de golpe en la cama.Ya no importaba, lo había hecho y estaba segura de poder seguir manteniéndolo en secreto.Incluso pensé que sería divertido, bajé las escaleras y me dirigí a la sala común, mientras me atusaba el pelo un poco, me senté en el huequito que dejaba James a la altura de sus piernas, mirando también el fuego, le miré dejando entrever cómo mis labios se curvaban en una sonrisa.
-Yo tampoco puedo dormir...-Susurré rendida al fin.

Estaba algo embobado con el fuego. No podia dormirme pero mi mente parecia estar ya lejos, como si estuviera en medio del camino, pero sin ganas de dormirme, aún esperaba que Lily bajara por las escaleras. El fuego chisporroteaba y aquel olor a leña quemada me encantaba, me recordaba al Valle de Godric en navidades.
Una voz demasiado conocida me sacó de mis pensamientos. Desde mi postura tumbada la miré, después sonreí un poco y luego la miré.

- Y a que se debe que no puedas dormir? -dije sonriendo.- Dudo que sea porque has hecho algo malo.-dije riendo.

Lo cierto es que el segundo caso era lo que me pasaba a mi cuando Sirius y yo nos pasabamos con una broma. Aún recordaba el dia en que me tocó salvar a Snape de aquella broma...aunque aquellos solo lo sabía Sirius...de hecho no sabia porque le habia salvado.

- ¿Puedo hacer algo para devolverte el sueño? -dije divertido mientras seguia tumbado.

-¿No se te quitan las ganas de bromas ni cuándo estás cansado?-Le dije mientras me acomodaba haciéndome un hueco en un pequeño rincón del sofá.

-Creo que no,no puedes hacer nada ante mi imsomnio; tu en cualquier caso me lo arrebatarías aún más.Pero podrías hacerme un hueco en el sofá y compartirlo.-Le dije asincerándome.Luego le hice mi propuesta de que me hiciera un hueco para tumbarme allí tambien, quizás así me entrara el sueño.

Si Sirius aparecía ahora estaba segura de que se burlaría, pero aún quedaba tiempo hasta que lo hiciera, además seguro que su amigo sabría cuando lo haría.Miré el fuego, y el baivén de las llamas, que hacían un baile en el hueco de la chimenea, el calor era reconfortante, notaba mi piel tibia, a causa de ello.

- Lo cierto es que no.-dije sonriendo.- Es mi carácter, no las hago simplemente porque me apetezca, suelo ser así.

Después la miré y sonreí divertido cuando dijo que yo le podia arrebatar aún más el sueño.

- Como se supone que debo tomarme eso? -dije sonriendo.- ¿Por que razón yo te quito el sueño? Me lo dices....y así tal vez pueda evitarlo.-dije sonriendo un poco.

Seguramente Sirius no llegaria hasta las 4 o las 5 de la mañana y aún eran las 12 i media, me quedaba un rato a solas con Lily.
La miré fingiendo ofenderme y despues le sonreí mientras la cogia del brazo.

- ¿Quieres un hueco en el sofa? -dije riendo travieso.- Está bien...

Tiré del brazo de Lily hacia mi y la hice caer sobre mi. Su cabeza, en aquella postura caía justo encima de mi pecho.

- Ves, ya te he hecho hueco. -dije riendo.

-Pues...-Respondí, empezaba a ruborizarme de nuevo, pero hice lo posible por no hacerlo ante su pregunta acerca de porque me quitaba el sueño-Porque...-No podía contestar a eso, no debía-¡No lo se...!olvidalo, no he dicho nada.-Dije intentando no alterarme demasiado.

Preguntó que si quería hueco y tiró de mí hasta dejar mi cabeza sobre su pecho, el no paraba de reir, seguramente poque le hacía gracia la forma tímida en la que ahora me estaba comportando.Me acomodé allí sobre él mientras una sonrisa se dibujaba en mi cara.

-James...esto es...extraño-Murmuré mientras hacía un gesto de extrañeza-Me siento bien aquí, pero...nunca podría haber imaginado que me encontraría tan bien en este momento, aquí, y de esta manera..

La miré extrañado cuando hablo entrecortadamente, lo cierto es que yo habia hecho la pregunta sin maldad, pero estaba seguro de que a ella le quitaba el sueño lo mismo que me lo quitaba a mi.

- Está bien.-dije riendo un poco.- No te lo volveré a preguntar.

La cabeza de aquella chica sobre mi pecho me daba basatnte tranquilidad aunque podia notar como se aceleraba un poco mi corazón, no sabia porqué estaba un poco nervioso y en cierto modo sabia que ella podia escuchar los latidos locos. La miré cuando me dijo aquello y después le enseñé una de mis mejores sonrisas mientras bajaba una mano para abrazarla.

- Las cosas que ni se planean ni se imaginan son las mejores.-dije sonriendo.- Una vida que ya sabes como va a ser es un aburrimiento.-dije riendo.- Yo, prefiero no planearme nada, simplemente hago lo que siento o creo que debo hacer.-dije sonriendo.

Noté los latidos de su corazón acerlerarse bajo mi oído, pues retumbaban fuertemente, y se aceleraban.Su respuesta me gustó después, admiraba esa libertad que tenía y su forma de pensar, sin complicaciones, simplemente haciendo lo que deseaba.Bajó una mano para abrazar aún más mi cuerpo, algo que me reconfortaba y me agradaba su suave tacto en los rincones desnudos de ropa que dejaban que nuestras pieles estuvieran en contacto.

-Supongo que tienes razón-Dije mientras alzaba la vista para mirarle a la cara.-Alomejor debería dejarme llevar más por lo que deseo.-Eso no solo iba por él aunque el lo entendería así, mi afán de responsabilidad, muchas veces me acababa atrapando, de tal manera que no conseguía disfrutar de lo que me rodeaba.Pero eso había desaparecido con James.

Sonreí un poco. A pesar de que yo aún llevaba el uniforme de Gryffindor, en camisa. Lily ya llevaba aquel camisón que dejabaalguna parte de su cuerpo al aire. Sus brazos que eran muy pálidos quedaban al descubierto por lo que pasé mi mano lentamente por aquella piel que era tan suave.
Escuché sus palabras y después rodé los ojos. Estaba claro que ella era demasiado responsable, en parte, por eso estabamos en aquella situación.

- Claro que tengo razón.-dije divertido.- Lo peor que puede existir es no poder cumplir un deseo, y peor aun que eso es no cumplirlo porque tu mismo no te dejas...-dije para después girarme hacia el fuego.

Aquellas mismas palabras me las habia dicho mamá hacia no tanto...o si? Ni lo recordaba. Miré a Lily y después sonreí un poco.

- ¿En que piensas? -dije mirandola curioso.

Sus dedos acariciaban mi brazo con lentitud y dejando con ellos suaves caricias que lograban hacerme estremecer a su paso.-No es que yo no me deje...es que hay ciertas cosas que es mejor evitar cuando sabes que algo saldrá mal.-Respondí. al igual que hacer travesuras acabarían teniendo su castigo particular, yo acabaría teniendo el mío siendo una de las tantas títeres que Potter utilizaba sólo para su distracción.Estaba segura de que ese momento llegaría.

-En...el tiempo que durará esta insensatez-Le dije esbozando en mi rostro una amarga sonrisa.Dirigí mi mirada al fuego mientras aún seguida tumbada sobre su pecho.Acaricié este por encima del uniforme con suavidad.

Una insensatez que me encantaba , pero de la que estaba segura que luego me arrepenteiria una vez que me hubiera dado de bruces contra el suelo.

Supuse que Lily tenia un mal concepto de mi. Al fin y al cabo yo era James Potter, el tipo que salía con muchas chicas y luego pasaba de ellas. Pero aquello no era así. Yo salía con algunas chicas, pero no siempre ella eran lo que busaba, y en ocasiones el títere era yo, que accedía a salir con ellas hasta que ellas decidían que ya habian adquirido suficiente fama.

- Las cosas no son siempre lo que parecen o cuentan.-dije molesto.- A veces vale la pena intentar averiguar como son el realidad.

Después volví mi atencion de nuevo hacia el fuego. Me molestaba que Lily tuviese aquella visión...insensatez...lo cierto es que habia hecho tantas cosas insensatas en mi vida que aquella no me lo parecia en absoluto.

- Durará el tiempo que tu quieras...-dije mirandola.- Porque la única que duda de ella eres tú. Yo he hecho tantas insensateces que sé reconocerlas, y por mi parte, esta no es una de ellas.

Lo de averiguar las cosas, esa frase la había tenido siempre en mi mente, averiguar por mi misma cómo era todo en realidad, de hecho lo había hecho con Snape, una y otra vez, de hecho era de las pocas personas que había logrado ver su verdadera personalidad.

-En eso tienes razón...lo intentaré-Dije asintiendo, alcé mi cabeza para colocarla a la altura de la suya sobre el brazo del sofá, no quería mirar a otro lado, quería escucharle bien, o más bien encontrarme con su mirada mientras hablábamos.

-¿Así qué no crees que sea una insensatez?-Pregunté extrañada.-¿Y si ahora mismo llegara McGonagall?¿Qué harías?o mejor aún alguna de esas chicas de tu club de fans...esas que vigilan tus movimientos dia y noche, si llegara la chica mas guapa de todo el colegio.O Sirius...¿Soportarías a Sirius después de haberte visto de esta manera conmigo?Porque estoy segura que te torturaría y te recordaría de forma poco simpática este momento con la ¨cerebrito ¨ de la clase.¿Sería este momento suficiente para arruinar tu reputación?-Le espeté, estaba claro que había muchos temas pendientes que James seguramente ni habría pensado.

Esperé a que ella se hubiese puesto a mi altura y clavé mis ojos en los suyos mientras ella soltaba toda aquella parrafada. Estaba seguro de que todo lo que habia dicho lo pensaba.

-Mcgonagall solo podria castigarme, y ya lo estoy.-dije riendo.- En cuanto a las supuestas chicas de mi club de fans, no me importa…muchas de ellas tan solo quieren ser las más conocidas de Hogwarts, a mi me dan igual…Todas son iguales…no hay ni una que no sea igual que la anterior.-dije sonriendo.- Y por último…¿acaso crees que Sirius no me conoce lo suficiente como para darse cuenta ahora?-dije riendo.

La verdad es que Sirius ya llevaba tiempo advirtiendome y riendose de esto, pero en cierto modo yo sabia que lo hacia sin maldad, o almenos no pretendía destruirme.

-Así que…todo tiene solución…solo hay que ser un tipo optimista como yo.-dije bromeando.

Mientras clavaba mis ojos me iba acercando poco a poco a su rostro, rozando levemente los labios con los suyos, sin llegar a besarla.

Sus contestaciones me dejaron de piedra, ¿En verdad no le preocupaba nada en lo que a mi concernía?¿y acaso Sirius ya sabía que James sentía algo por mí? Si era así eso explicaría algunas de las notas de la conversación con él aquel día en el bosque prohibido cuando aparecieron los centauros.

-Y si no tiene solución, tú se la encuentras...-Dije riendo yo tambien.

Rozó sus labios con los mios y no pude evitar hacer los mismo mordiendo suavemente y tirando de su labio inferior en un gesto pícaro.Me volvía loca, no podía evitar hacerlo a pesar de estar en un sitio en el que podíamos ser descubiertos por cualquiera de nuestros profesores o compañeros.

-¿Aún tienes ganas de seguir jugando, eh?

Le pregunté con una suave voz en su oído.

Sonreí satisfecho cuando me preguntó lo primero. Desde pequeño mi mayor virtud siempre habia sido la de ser muy optimista, nunca me daba por vencido y siempre le encontraba una solución sencilla a todo.

- Exacto, así que deja de buscar problemas.-dije sonriendole.

Noté una corriente eléctrica cuando ella tiró de mi labio inferior. La abracé acercandola más a mi y después la besé otra vez, tierno, dulce...con bastantes ganas...como si lo tuviese todo contenido. Después escuché lo que me dijo y negé con la cabeza.

- Querida señorita Evans,-dije riendo.- esto es mucho más que un juego.

Me acercó a él y me besó de forma tierna y dulce, correspondí su beso sintiendo sus tibios labios sobre los míos.Mi corazón se aceleró golpeando fuertemente desde el interior de mi pecho.

-Lo se, es mucho más peligroso y mejor y más divertido que un simple juego-Le respondí a su frase.

Acaricié bajo su camisa su costado libre con mis manos, el fuego había logrado hacerme entrar en calor así que suponía que él tampoco sentía frío en esos momentos, le entregué un beso pasional, cargado de toda mi energía mientras me aferraba con mi mano fuertemente a su costado sin apenas darme cuenta.Mi dedo índice paso de forma sensual acariciando sus labios.