Und ich vermiss Deutschland! {Soph}

LA verdad, por más fiel que yo le fuera al señor Tenebroso, jamás podría ser capaz de andar con un sangre sucia o un mestizo como lo era Lupin, pero también sería difícil conseguirlo yo, al fin y al cabo, no podría estar jugando con los tres, ya difícil serían James y Sirius como para hacerlo también con ese tarado.

Ella me preguntó acerca de lo que ocurría y yo desvié la mirada al suelo, sintiéndome del todo desvalida ante la confesión que habría de hacerle a la que se había vuelto mi hermana.

- Linna, mi madre murió cuando yo tenía 13 años y...y desde entonces, mi padre me ha usado a mí como su reemplazo, cuando Royce está dormido él...él entra a mi habitación y...- susurré incapaz de terminar la frase

Conforme ella iba hablando sentí que me hervía la sangre de la rabia. Bien decían que los alemanes éramos bastante iracundos y que llegábamos a dar miedo en ocasiones... pues bien, miedo será poco comparado a lo que sentirá el maldito bastardo ese - Hurensohn... - dije en voz grave, casi escupiendo la palabra y sin pensarlo abracé a Sophie con fuerza.

Yo no era mala, simplemente era muy radical con mis ideas... por eso no confraternizaba con los traidores, mestizos o los sangresucia; pero con mis amigos era diferente... muy diferente. - No podemos permitir que eso continúe, querida - dije con tristeza, sin dejar de abrazarla - ni hablar, está decidido... te vienes a Alemania conmigo, no vas a volver a esa casa, Soph... te lo juro por mi linaje impecable - dije con rencor en la voz... quisiera tener delante al padre de Soph para poder matarlo a crucios... y claro, Royce no hacía nada, porque no lo sabía... me moría de ganas de decírselo para que hiciera algo y lo impidiera... pero por desgracia, ya había dado mi palabra.

Abracé a Linna aguantando las lágrimas, para mí era demasiado vergonzoso admitir aquello porque como bien decía mi hermano, tomaba una actitud sumisa ante mi padre y eso era algo que odiaba tener que admitir, nisiquiera frente a Royce, por eso jamás le había contado que mi padre me violaba, ya era demasiado que supiera de los latigazos, ya que éstos se veían a simple vista, pero si podía lograr que mi hermano no supiera de las violaciones, lo haría. Sin embargo, mantenerlo tanto en secreto estaba causándome mal, y si había alguien más aparte de Royce en quien confiar, esa era Linna.

Ella me dijo que me iría a Alemania con ella y que no volvería a mi casa. Yo ya no planeaba volver de cualquier modo, Royce y yo llevábamos ahorrando desde niños y teníamos el dinero suficiente para mantenernos y salir adelante sin mi padre, el contar con Linna sólo hacía mejor las cosas.

- No soy débil Linna, te juro no lo soy, pero mi padre me aterroriza y siempre ha sido la peor de mis pesadillas...he intentado demostrarle que no me someteré más...pero siempre vuelve y es más violento cuando me resisto...y...ya no lo soporto más. He querido decírselo a Royce, pero me avergüenza tanto, y sé que se molestará mucho y...y no quiero eso, no quiero meter a mi hermano en mis problemas, ya no más.

Escuché a Sophie, sin decir palabra... lo que necesitaba era apoyo y un hombro sobre el cual llorar y yo se lo daría de forma incondicional. Sophie era la única persona en este maldito colegio que me trataba como su igual, sin discriminarme por ser extranjera y la única que podría decir que es como mi hermana. Era increíble cómo podíamos congeniar tan bien, al punto de que yo la consideraba como una hermana.
- lo sé, cariño, lo sé... sé que no eres débil... eres una de las mujeres más fuertes que conozco y que conoceré... no te preocupes Soph... no dejaré que te vuelva a tocar... si no puedes ir a Alemania conmigo, podemos quedarnos en la casa en la que vivimos aquí en Inglaterra, verás que te gusta, se ve lindísima... y mamá la ha decorado maravillosamente - cambié de tema porque no quería que Soph se autotorturara con eso. Yo no sabía exactamente por lo que ella pasaba, pero recuerdo a mis tíos llamándome "animal mágico" cuando yo era una niña, debido a mi naturaleza de Veela. Yo sufría mucho porque nos atacaban a mamá y a mí, pero afortunadamente papá y el abuelo me defendían... pero Soph no tenía quién la defienda... Royce podría hacerlo, pero... estaba segura de que Soph estaba muy avergonzada de lo que ocurría y no iba a decírselo a su hermano.

Sabía que podía contar con Linna en cualquier momento y para lo que yo la necesitaba. Sin embargo, había cosas de las que una no podía huir, y yo comenzaba a pensar que mi padre era una de esas cosas de las que no podías escapar, y la verdad me preocupaba lo que pudiera hacernos a mi hermano y a mí. Ambos éramos los únicos miembros de la familia capaces de seguir con la línea de sangre, pero comenzaba a pensar que mi hermano se´ria suficiente para mi padre, que si yo decidía irme, simplemente me mataría y dejaría que mi hermano siguiera con la descendencia.

- Ay Linna, a veces no sé si sea lo más idóneo huir, mi padre me matará si lo hago y me descubre y...y no soportaría que le hiciera algo a Royce...mi vida es un infierno, pero en cuanto tengamos aquello que el señor Oscuro desea, le enseñaré a mi padre lo que es el infierno y cómo yo lo tuve que sobrevivir.